lunes, junio 16, 2008

Esto no es nada, de Angel Gonzalez


Mi amigo Goliadkin, me ha traido a la cabeza al poeta Angel Gonzalez, su autor favorito.

Goliadkin es un poeta que ha aparcado unos años la pluma y ahora menea una espada de madera en sus ratos libres. Fuimos amigos, luego enemigos cercanos, y tras resolver un cúmulo de malentendidos e incomprensiones, más amigos aún. Fue quizás la primera vez que me di cuenta de lo tontos que podemos ser las personas y que no se puede permitir que algo así ocurra de nuevo.

Revolviendo internet para elegir un poema me encontré este. Me quedé sorprendido por el tema y la idea, aunque ignoro si el autor lo habrá escrito desde la perspectiva con que yo lo miro. Sea como sea, las palabras y el mensaje que cada uno entienda es lo importante. Espero que también os guste.








Si tuviésemos la fuerza suficiente
para apretar como es debido un trozo de madera,
sólo nos quedaría entre las manos
un poco de tierra.
Y si tuviésemos más fuerza todavía
para presionar con toda la dureza
esa tierra, sólo nos quedaría
entre las manos un poco de agua.
Y si fuese posible aún
oprimir el agua,
ya no nos quedaría entre las manos
nada.

4 comentarios:

Artea dijo...

Nos quedaría la nada, donde todo cabe.
Y unas manos vacías, de todo.:)

Ashbless dijo...

La nada es la raíz de todas las cosas. De la nada surgió el uno, lo manifestado, y este se dividió en los opuestos, que son dos. Orden y desorden, luz y oscuridad, caliente y frío, masculino y femenino...

De estos contrarios unidos, nacieron todas las cosas que forman el mundo. Todo lo nuevo y lo viejo que hay ha sido posible gracias a la existencia de un vacío que pueden ocupar, que estaba antes que ellos, y que finalmente los acogerá cuando acabado su momento
desaparezcan.

Y por supuesto, las dos manos vacías...

Artea dijo...

Unir las manos
izquierda sobre derecha
con los pulgares enfrentados
en contacto suave
trazando una línea recta
justo por debajo del vientre
en la postura justa
en la justa respiración
en el momento justo
en el mayor de los silencios
hace surgir desde esa nada
la conciencia que está detras
del profundo vacío
de la no forma.

Ashbless dijo...

Hermoso.

El vacío porta la promesa de acallar el ego. Y así el observador es consciente del ego, y oh! sorpresa de si mismo.

El profundo vacío engendra la calma. Y la felicidad inmóvil, estática, de la consciencia. Todo está en su lugar, porque se mueve siguiendo su propio curso. Todo es correcto, porque es. Y si te mueves con las diez mil cosas, en realidad no te mueves, sino que sigues el camino, sigues en tu lugar. Sigues tu camino.