lunes, enero 16, 2006

Anímación y lágrimas...


















¿Habeis llorado con unos dibujos animados?

No es una pregunta trivial. Ahora que somos adultos, seres duros, rigidos, de rabias y penas secas, las lagrimas no son faciles, pero hubo otra época en que fluian con facilidad.

Tambien han cambiado los dibujos animados actuales, que ya sean productos de merchandising como Pokemon, o cosas más ambiciosas como los de Cartoon Network, son cosas alegres y dinámicas.

Ahora, yo me tragué Heidi, la historia de esa niña desplazada, o la trágica busqueda de Marco, que nunca encontraba a su madre, por mucho que viajara... No recuerdo muy bien aquella época, pero si recuerdo que se sufría un montón...

Posteriormente descubrí los dibujos de Disney, pero esos nunca me hicieron llorar, quizas porque la muerte de la mamá de Bamby me pilló demasiado mayor, y porque tampoco eran tan dramáticos; recordemos el comité de psiquiatras que reunió la firma para hacer la muerte de Mufasa...

Ahora bien, aunque otros dias haga una reivindicación de la comedia, ahora no lo hago del drama. Éste es capaz de cuidarse por sí mismo. No, si acaso hablo de la capacidad de conmover, de hacerte participe, solidario de las alegrias, penas y confusiones de los personajes. Y esto en dibujos animados lo he visto en estos últimos años muy pocas veces, y a mí no me parece la animación un género menor, au contraire!

Por ejemplo, sin ser una palícula en absoluto triste, Monstruos S.A me remueve las lágrimas en las escenas de separación y reencuentro de Sully y Boo. Es muy dificil no simpatzar con una buena persona - o monstruo- como Sully y su conflicto al descubrir las consecuencias de sus acciones. ¿Y quien no querria a Boo? En Buscando a Nemo, sin embargo no sentí nada... pestañas secas.

En el Gigante de Hierro lloré con la escena final, cuando el gigante dice "Superman" Cuando veais la película, lo comprendereis...

¿Habeis visto Kurukú y la bruja? Es una bellísima película francesa de animación, que narra un relato africano de caracter mítico. Con una banda sonora excepcional y animación artesana, es divertida y cautivadora, nada convencional. De hecho, siendo una película muy adecuada para niños, no he visto nada más alejado de la superficialidad de Disney.

Y si hablamos de la capacidad de solidarizarte con los personajes, de hacerte compartir sus sentimientos, esto se consigue con un buen guión, que cree personajes creibles, con personalidad y que cuente una historia que nos implique. El mejor director de anímación, el que me hace conmoverme, de alegria, confusión o tristeza, es japones.

Se llama Hayao Miyazaki, y más que a él conocerás algunas series que dirigió como Heidi, Lupin III, Sherlock Holmes o Ana de las tejas verdes. Tambien es popular "el Viaje de Chihiro", Oscar a la mejor película de animación y Oso de Oro del Festival de Berlisn, categoria absoluta.

Este director ha creado algunas de las más hermosas historias dibujadas. Respecto a las lágrimas, se me humedecen los ojos cada vez que veo un Totoro, o el ambiguo final de Porco Rosso.

Voy a acabar ya este texto, no diseccionaré las películas de Miyazaki. Si teneis niños, o conoceis alguno, usadlos como escusa, conseguid, o bajad o robad alguna peli de Miyazaki, sea "Mi vecino Totoro", "El castillo en el cielo", "Porco Rosso", "La princesa Mononoke", o "El viaje de Chihiro", y preparaos...

No para dramones, sino para sentiros un poco más vivos, más cercanos al resto de la humanidad, quizas más felices, pero sobre todo, más vivos...

1 comentario:

Anónimo dijo...

El viaje de Chihiro, Lain, Princesa Mononoke, Katy la Oruga , Vampire Hunter D. Pero sobre todo, Katy la Oruga. Una animación mexicana, viejísima que no he logrado encontrar pero que me hizo llorar a monzones.