domingo, agosto 24, 2008

La vida que nos espera




















¿Que vas a ser cuando seas mayor?

Es una pregunta muy corriente con los niños, sobretodo cuando no sabemos que decirles. Los críos, con el entusiasmo de estrenar la vida, no tienen reparos en compartir sus sueño o las ideas que se les han filtrado de alguna parte.

Yo también me he hecho esa pregunta, y muchas veces. Más, porque no ha perdido validez con los años. ¿Que voy a ser cuando sea mayor? O mejor dicho, ahora que ya no cumplo los treinta, ¿que voy a ser después?

Primero disfruté de la salvaje falta de horarios de la infancia, luego empecé con unos serios cuatro años preescolar. Más tarde, estudiante de una EGB que hoy parece imposible. Luego BUP. Continuando con las siglas, COU, solo un año para ir a una carrera que no me convencía, y que tardé muchos años y créditos en atreverme a dejar. Luego trabajar, de profesor, de camarero, años ahora de informático. De nuevo estudiante, de Fisioterapia. Y como se que aún esto es temporal, en ratos ociosos me pregunto ¿Y después, ¿que?

No hay un paso definitivo, excepto el último. Aunque tu vida esté estructurada, aromatizada y sanforizada, cualquier cosa puede fallar. El terrible accidente de Barajas con 153 muertos es solo un ejemplo de los que llegan a la prensa.

Ahora vivo como un estudiante mayorcito. Tras pruebas y múltiples errores me estoy acostumbrando a compaginar trabajo y estudios. Disfruto de un trabajo que no me llena pero que es estable, y una excelente plataforma para estudiar. Desde aquí parece más fácil hacer todas las correcciones y ajustes posibles, incluso unos estudios superiores o adicionales, antes que saltar al vacío. Vacío al que se llegará en cualquier momento y que está ahí, inevitable.

En los últimos tiempos y más cerca el final de esta carrera empiezo a ver la realidad de la profesión de cerca, y está llena de agujeros y piedras, como la luna. El sueldo y las expectativas de un buen ejercicio de tu profesión son de la mitad si eres fisioterapeuta en lugar de enfermero. Esto se debe a que los enfermeros son profesionales tan necesarios en el sistema de salud español como los médicos y los auxiliares. Sin embargo la fisioterapia aporta calidad de vida, rehabilita a accidentados y enfermos, pero no es cosa de vida o muerte.

¿Que seré cuando sea mayor? Es una pregunta que mientras se formula, condiciona o favorece una respuesta. ¿Quien seré cuando sea mayor? Otro, eso si lo tengo claro. Tan cercano al de ahora como un hermano mayor o un primo de alemania, la vida da muchas vueltas y siguiendo con el refranero, nunca digas de este agua no beberé...

Mientras, preparo un examen para este septiembre. Un curso más y algunos exámenes y prácticas adicionales y seré diplomado en Fisioterapia. Incluso, fisioterapeuta.
Con eso podrán llegar o no grandes cambios en mi vida. Seguiré respirando y comiendo, espero. También, subiendo montañas. Si cambia mi lugar y actividad de trabajo, cambiarán las ocho horas diarias de vida, ¿pero importa mucho?

No lo se. Si lo supiera no necesitaría escribirlo, darle forma una y otra vez. ¿Y después de la fisioterapia? Muy lejos apuntamos, quizás algo distinto, o quizás siga ahí mucho tiempo. Lo que es seguro es que al final... todos nos jubilamos, de una manera u otra. Y esto es independiente de todas las preguntas.





El increible retrato es de Tamás Somoskeöy, genio de la fotografia de 16 años. Su hermosa modelo y compañera de clase tiene más retratos como este.

2 comentarios:

Calle Quimera dijo...

Seguramente nunca dejamos de ser estudiantes que trabajan, Ashbless, al menos cuando tienes inquietudes. Siempre estamos aprendiendo, aunque no estemos matriculados en ningún centro docente ni vayamos con el libro debajo del brazo. Eso es parte del proceso de evolución de los seres humanos, creo que casi lo mejor que tenemos. Así que seguramente ni merece la pena preguntarse qué será lo próximo , solo ejarlo llegar a nuestras vidas.

Un besote.

Ashbless dijo...

Tienes razón.

Incluso añadiria que en el momento en que te niegas a aprender cosas nuevas empiezas a envejecer. Y aún así para vivir hay que adaptar cosas a lo que está por llegar.

Este post es la manifestación de uno de los muchos errores que contiene nuestra educación, que vamos a ser algo concreto. Si como decia Cortazar, cada dia tiene un número diferente de mundos que lo componen, que será de la vidas...

Besos