Tiempo...

Hace ya unos dias que no escribo en el blog. De hecho, en los últimos dias solo he puesto las entradas imprescindibles, para manteneros minimamente informados de lo que me pasaba.

Hoy por fín he encontrado cinco minutos ( o media hora) para poder volver a esta ventana.

Desde las ultimas semanas no solo he montado en bicicleta, me la han robado, me he comprado una nueva, o incluso, me he dado algún golpe con ella.

Tambien he hecho muchas cosas, he trabajado un puñado de turnos,
he dado algunas - pocas- clases, no estudiado ingles, ido algo a la autoescuela, he conocido a una nueva profesora de yoga, he profundizado en el camino que sigo con alguien, y muchas cosas más...

En los ratos malos he tenido la impresión de no estar haciendo nada, pero veo, se, que es solo en algunos objetivos que me he fijado, como el ingles o la autoescuela, donde no he avanzado.

Preocuraria no ponerme objetivos, dejar que la vida y sus impulsos me fueran permeando y enseñando, gradualmente o con deslumbramientos y sorpresas. Pero para finales de este verano quiero defenderme en ingles, y tener el carnet, y esta intrusión en el ritmo de un dia a dia espesísimo, me desequilibra.

Así, de vez en cuando me sorprendo cansado, y necesitando parar un rato, que seria el que toca para ingles o el carnet. Me he dado cuenta, y esta semana santa voy a intentar cambiarlo. No prometo nada.

Ultimamente no he ido mucho a yoga, sobretodo, tras el golpe que me dí con la bici. Tengo el cuello resentido. Pero he conocido a Eva, una chica que da clases de yoga, gratuitas, en el centro Yesqueros, los lunes y quizas miercoles de 18 a 19:30. No he abandonado a mi profesora de siempre, pero esto es un complemento, y además un estilo distinto, más ortodoxo.

El miercoles me matriculo en Kundalini, otro yoga distinto. Ya os contaré que tal, ya lo conozco y he ido a una clase, pero te carga muchísimo las pilas, y espero que me anime más aún a hacer cosas.

Por otro lado, aunque voy bien en esto y he mejorado mi flexibilidad bastante, mis lumbares siguen mal, y he decidido al fín -me ha costado- ir a un fisioterapeuta, para tener una espalda sana, sin mis desviaciones tremendas, y tambien profundizar en yoga. Ahora soy como un aficionado al footing que tiene un menisco roto... Vamos a ver si mejoro cuando esté sano.

Sigo avanzando despacio con mis lecturas, pero ya he abierto algunos libros, de masaje, filosofia, y alguna novela que me han prestado. De todos modos la semana pasada hice novillos y me leí "Cena en el palacio de la Discordia" de Tim Powers.

Una gozada. Lo recordaba como una obra menor, del maestro, pero menor... Es un excelente libro de aventuras y ciencia ficción, y el protagonista, como buen personaje de Powers las pasa durísimas para llegar al final del libro. Lo consigue como siempre con algun trozo menos pero siendo dueño de sí mismo y su destino.

Este fín de semana amenaza que me lea "la Última Partida" tambien de Powers. Es un libro "Mayor" que es el origen del nombre de este blog.

Powers es mi escritor favorito. No es el mejor prosista, sus mundos fantasticos y sus paradojas no son tan complejos como los de un Vance o Borges, pero la infinita vitalidad de sus personajes y sus historias me arrebata del mundo durante horas, y siento siempre, una cercania con sus personajes absoluta.
No os perdais alguno de sus libros. El más deslumbrador es "Las puertas de Anubis", genial, aunque con un final brusco. "La fuerza de su mirada" es muy buena novela, compleja e histórica, pero "La última Partida" ha hecho eco en mi mente durante años, años...

Que más deciros?

Estoy saliendo con alguien genial y maravillosa. Mis dias - y mis noches- tienen otro color, más intenso si cabe, y siento que cada dia aprendo algo nuevo. Con compañeras de viaje así es un gusto andar por esta vida...


PD: La foto es de David Fokos, un excelente artista que he encontrado en la galleria de Robert Klein. Que lo disfruteis