lunes, octubre 30, 2006

Una semana nueva































Hay épocas en las que sientes que todo es viejo. El aire huele a cerrado, y respirar es reciclar lo que ya has sudado y sufrido. Los hitos de tu camino son tan inevitables, e incluso insufribles, como todas las horas que marcan tu piel.

Hay tiempos de finales. Cada encuentro es una despedida, y sabes que nada va a durar, permanecer, por mucho que lo agarres o halla sido una constante en tus dias. Puedes sentir alivio, o hundirte con todo lo que te rodea.

Y hay dias de comienzos, en los que estrenas mañanas limpias, y las tardes son naranjas, no pardas. Tienes experiencia, pero ni cicatrices ni pesares. Eres libre de dolor y rencores, libre para comenzar.

Yo estoy empezando cosas, y siento tambien el final de otras, pero lejano, como si no tuviera apegos, o me hubiera lavado la memoria con un jabon de flores. Las clases en la universidad se presentan como una segunda oportunidad, algunos lazos se han reestablecido armoniosamente, e ir a trabajar, que habia sido algo tenso y duro en las semanas de horas extras y presión anteriores al viaje, aparece ahora como algo inodoro, indoloro y con un leve sabor a menta.

Estoy viviendo, una vida y media o dos, empleado, estudiante, hombre, amigo, ciudadano de nuevo de una sociedad que se me aparece como llena de comodidades y lujos -y oportunidades- tras el paseo que me he dado por otros lugares.

No he tenido tiempo o ganas de actualizar esto durante los ultimos dias. Pero es que hay algo más importante que escribir de tu vida; vivirla.

1 comentario:

Anónimo dijo...

me gusta eso de "Estoy viviendo, una vida y media o dos .." lo usare en mis memorias.

un beso.
Aj.