lunes, octubre 23, 2006

Historia, de Julio Cortazar

























Un cronopio pequeñito buscaba la llave de la puerta de calle en la mesa de luz, la mesa de luz en el dormitorio, el dormitorio en la casa, la casa en la calle. Aquí se detenía el cronopio, pues para salir a la calle precisaba la llave de la puerta.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

tu eres cronopio o fama?
Aj

Ashbless dijo...

He sido cronopio, luego me convencieron que habia que ser fama... Luego recupere los andares de cronopio, y ahora a ratos tambien soy poeta.

Anónimo dijo...

a mi tb me gusta pensarme como cronopio. los que alguna vez lo hemos sido (afirmo) nos entendemos bien, je!.
besos.
Ajur.