sábado, diciembre 16, 2006

El Belén, de Mr Bean



Hace un siglo que no pongo un arbol de navidad o monto el belén.

No hecho de menos hacerlo, sino las sensaciones que acompañaban esos momentos. La colaboración con mi padre, la belleza de los adornos de plástico brillante y cristal, el ritual, y sobretodo, la ilusión.

No está perdida, pero si embotada. Por eso me gusta tanto Mr Bean, porque no se corta a la hora de ponerse a jugar con el belén.

Me parece que me pierdo muchas cosas por no saber pedir las cosas, jugar con ellas, o simplemente aceptar lo que tengo delante.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

¡JE, JE, JE! Muy gracioso, me lo he pasado muy bien viéndolo (y eso que no me agrada demasiado la Navidad).

Anónimo dijo...

Simplemente B R U T A L !!!!

jejejejejjeje.... que zorra eres....

gracias tb por dar risas.... guapetón!!!!

Ashbless dijo...

Mi peli favorita de navidades es "Pesadilla antes de Navidad"

Si no te mola la tierra de navidad, pasate a la ciudad de Halloween, o la de tus dias propios, como los funcionarios. No es obligatorio ser ciudadano de Navidad, aunque por la tremenda brasa que dan, parece que no hay alternativas.