domingo, noviembre 11, 2007

Intolerantes anónimos



Gracias a Carlos de Apodérate por enseñarme el vídeo. Siempre he pensado que la intolerancia y el miedo son problemas que curar. Y que las personas que los padecen tambien merecen superar esta limitación, y disfrutar de la paz de ser libre.

7 comentarios:

Igualdad y no discriminación dijo...

Gracias a ti M.A. por haberme introducido en este mundo real o irreal bloggeril.

A ver si al menos alguna conciencia se remueve al ver una imagen como esta.

Animo a los demás bloggers a difundirla.

Saludos y abrazos

Ashbless dijo...

Gracias a ti por seguir compartiendo charla a charla, café a café, tu experiencia vital y esa penetrante visión que tienes del mundo y las personas. Tengo muchos maestros, y tu eres de los mejores.

Un abrazo

Unknown dijo...

T´as pasooooo

Ya sabes: aprendiz de casi todo, maestro de nada.

Aún así... Muchas gracias!!

Carlos Alberto Arenas dijo...

Muy buen video...
Y me alegro sinceramente de positivo estado de animo que reflejas en tus anteriores post

Ashbless dijo...

Muchas gracias Kray...

Creo que he empezado a ser consciente del estado de mis fuerzas, de mi energia vital. Ese es el primer paso para saber administrarla y sobretodo respetarla.

Pero queda un largo camino aún. Claro que ese camino es mi propia vida...

Un fuerte abrazo

Calle Quimera dijo...

No discriminemos al racista. Ayudémosle a entender.. Es otra óptica del problema, nunca se me había ocurrido, y lo cierto es que lleva razón. El racismo es algo que debe desaparecer, y la solución no es anatemizarlo por sistema y punto, sino convencer al racista de lo equivocado de su actitud. El único racista que dejará de serlo es el que al fin entiende su error, no el que es denostado por la sociedad.

Buena lección, sí señor. Besos.

Ashbless dijo...

Si rechazamos al racista le seguimos dejando aparte, solo, alimentamos sus miedos e incluso sus rencores. La solución de este problema pasa por la sanación, por librarle del miedo al otro y a las diferencias.

Miedos que siempre pueden aparecer en este mundo donde todos somos afortunadamente distintos. Esperemos que el camino se vaya andando.

Besos